Una planta eléctrica es un equipo que se encarga de transformar la energía mecánica en energía eléctrica por medio de la transmisión del movimiento del eje del motor al rotor del alternador donde se produce dicha energía, cuando el rotor gira a alta velocidad debido a la energía mecánica aplicada por el motor de combustión se produce dentro de los hilos del interior del extractor una energía llamada fuerza electromotriz la cual nos permite generar la corriente eléctrica a cualquier equipo conectado al alternador.
A la hora de adquirir una planta eléctrica debemos tener en cuenta algunos datos necesarios como el definir la carga que necesitamos en nuestras instalaciones, identificar el voltaje con el que vamos a trabajar los equipos que es a 120, 220 o 440, las fases pueden ser monofásico o trifásico y otro asunto que se debe tomar en consideración es que tipo de combustible vamos a utilizar los cuales son: gasolina, Diésel, gas propano o combustible dual.
Contar con una planta eléctrica al principio fue un lujo, pero ahora se ha convertido en una necesidad ya que la electricidad hoy en día es tan importante como el oxígeno, porque para poder trabajar necesitamos de ella, y es indispensable contar con una planta eléctrica en el caso que en cualquier momento ocurren apagones que de ello se derivan causas como la interrupción de procesos industriales.
Es esencial el uso de una planta eléctrica para el uso de espacios abiertos donde no se cuenta con energía eléctrica, alimentar edificios, eventos, restaurantes, hoteles, hospitales, eventos, conciertos en vivo, apoyo a paneles solares, para usar en campings o similares, construcción, demolición, como sistema de emergencia automático, apoyo en instalaciones de energías renovables.